Una invitación para visitar Cuba
Revista Política de Serbia publicó un artículo, en formato impreso y digital, en el que menciona el turismo, la música, el baile, las playas, las universidades, la medicina, los monumentos, sitios históricos, culturales y los daños del bloqueo
Belgrado, 28 de mayo de 2023. La revista Política en su formato impreso publicó el 14 de mayo un artículo dedicado a Cuba, el cual reprodujo en su versión digital del día 17 bajo el título: “Para la felicidad no necesitan mucho” o “No necesitan mucho para ser felices”, según las distintas versiones de traducción que se puedan hacer, el cual constituye una invitación para visitar la Mayor de las Antillas. Seguidamente la traducción del texto del artículo:
“No tienen prisa, no están nerviosos, no están obsesionados con la tecnología ni la constante búsqueda de trabajo, en las plazas hay samba y tango – y eso es lo que atrae a muchos turistas. Por supuesto, junto con un clima cálido, hermosas playas, vida nocturna y una rica historia
Gente alegre bailando espontáneamente samba y tango en las plazas.
Lujosos hoteles destinados a extranjeros y ruinosos edificios de la época colonial, sin ventanas ni puertas, donde vive la población local. Estantes medio vacíos en los mercados y restaurantes famosos llenos de gente donde esperas durante horas por un asiento libre. Prestigiosas universidades de fama mundial, clínicas famosas.
La capital dinámica
Amplios bulevares planificados y un tráfico caótico en los que se pueden ver los medios de transporte más insólitos. Y niños. Relajados y espontáneos, que, como nosotros en la era pretecnológica, se pasan todo el día en la calle y se alegran de verdad cuando los turistas les regalan caramelitos o alguna cosilla. Estas son solo algunas de las impresiones que los turistas de Europa pueden sentir en La Habana, la capital dinámica de la República de Cuba con dos millones de habitantes. A primera vista caótica y llena de contrastes, todos crean un conjunto armonioso que se puede describir en los términos más simples en tres palabras: insoportable facilidad de vida.
La principal impresión que pueden llevarse de Cuba los visitantes de otras partes del mundo, especialmente de Europa, es que no se necesita mucho para ser feliz. Aquí no hay prisa, nerviosismo, prisa constante por el trabajo, obsesión por la tecnología que es característica de otras partes del mundo.
Se ve que hay escasez, que la vida es difícil, que las personas se las arreglan de diferentes maneras para hacer algo, pero eso no impide que sean alegres, cordiales, espontáneos, que acepten todas las situaciones de la vida con una sonrisa. Esa relajación sigue siendo uno de los símbolos de La Habana, señala Irena Todorović, guía turística de Belgrado, quien recientemente visitó esta capital caribeña.
Han pasado seis décadas desde que se llevó a cabo la revolución socialista en Cuba, cuyos símbolos son Fidel Castro y Ernesto Guevara. Las sanciones impuestas a este país por su vecino más poderoso- los EE.UU. todavía siguen. La Revolución y las sanciones dejaron una huella imborrable en su capital “San Cristóbal de la Habana”, el nombre en español de esta ciudad.
Pero aún se pueden observar ciertos cambios, aunque las autoridades cubanas de la época posterior a Fidel y Raúl Castro no cambiaron los fundamentos de su política.
Así, en los últimos años, se pueden ver cada vez más turistas de los EE.UU. en La Habana, lo que antes era raro. Por supuesto, también hay algunos de otras partes del mundo, y debido a las sanciones que les impiden ir a otros países, parece que este año y el pasado hay especialmente muchos rusos. Ya no hay restricciones en el acceso a internet, que se puede usar libremente, que no ocurría hasta hace unos años, y hay otros ejemplos de apertura hacia occidente.
Pero también parece que la crisis cobra fuerza, lo que se nota especialmente en los precios, que son significativamente más altos que en los años anteriores, por lo que no queda claro para los turistas cómo los cubanos pueden llegar a fin de mes con sus modestas ganancias. Hay otras sorpresas también. Por ejemplo, en los mercados, tiendas, restaurantes, se utilizan exclusivamente tarjetas, lo que fue una sorpresa para la mayoría de los turistas. Se puede comprar en efectivo, generalmente solo en la calle. Por un euro le salen unos cien pesos cubanos, y los precios son, para los ingresos de allí, altos y parecidos a los nuestros. Uno de los productos que no es fácil de conseguir y no es barato es el agua, que aquí se compra o se hierve. Por toda la ciudad se puede ver gente cargando por la calle el agua así obtenida en botellas de un litro.
Sin embargo, a pesar de estas dificultades, la gente es orgullosa de su libertad e independencia ganadas con tanto esfuerzo. Una de las cosas positivas que trajo la Revolución son las relaciones armoniosas entre diferentes etnicidades-descendientes de colonialistas españoles, negros, mestizos, pero también de otras partes del mundo, quienes son completamente iguales en derechos, lo cual no era el caso antes de la Revolución.
Cuba, y especialmente su capital, La Habana, cuenta con una excelente educación, un alto porcentaje de personas con estudios universitarios y una larga expectativa de vida. Esto también es consecuencia de la excelente atención médica, gratuita y disponible para todos, y muchos médicos cubanos continúan en misiones humanitarias por el mundo.
Por todo eso, muchos monumentos y edificios de La Habana aún nos recuerdan a la Revolución. Es interesante que no haya muchos monumentos dedicados a Fidel Castro, pero no por un cambio de opinión sobre él, sino por su modestia y forma de vida. Es uno de los pocos líderes socialistas que no invirtió mucho en esas cosas y durante cuyo gobierno no se plantearon.
Pero por eso el Che sigue siendo una de las principales estrellas. Por todas partes se pueden comprar recuerdos y camisetas con su imagen, sus murales dominan muchos edificios, y uno de los principales lugares de La Habana es la casa donde se alojó durante la revolución y que ha sido convertida en museo.
La ciudad tiene una buena ubicación geográfica y se extiende al oeste y al sur de la Bahía de La Habana, a la que se ingresa por un estrecho paso. La Habana está dominada por las fortalezas coloniales del Castillo del Morro, San Carlos de la Cabaña y la Fortaleza de la Fuerza Real, y el río Almendares fluye lentamente a través de la ciudad.
La rica historia de La Habana comenzó hace 500 años, en 1515, cuando fue fundada por el conquistador Diego Velásquez de Cuéllar. Aparte de un breve período, cuando la ciudad fue gobernada por los británicos, La Habana estuvo mayoritariamente bajo el dominio español hasta la independencia de Cuba. Por eso el núcleo antiguo está dominado por la arquitectura colonial. Se conserva en su mayor parte, pero también está bastante deteriorada, por lo que se pueden ver edificios muy protegidos, pero también abandonados de los siglos XVIII y XIX, sin puertas ni ventanas. En el centro de la ciudad hay algunos de los edificios más hermosos, que pertenecen al patrimonio mundial, así como plazas con edificios construidos un poco más tarde, que definitivamente deben visitarse.
La Habana, especialmente en la primera mitad del siglo XX, se volvió muy popular entre los vacacionistas estadounidenses. Frank Sinatra, Ava Gardner, Gary Cooper, Ernest Hemingway se hospedaron allí y se enamoraron de ella, ya entonces se hizo famosa por su vida nocturna y aunque la mayoría de los bares famosos de esa época están cerrados, se quedó el epíteto de una ciudad conocida por divertirse. Y la buena diversión es algo que aún sigue en La Habana y algunos de los cafés de esa época han quedado, uno de ellos siendo el famoso “Floridita” donde se hospedó Hemingway. También está su busto, hay muchos visitantes, por lo que hay que esperar por una mesa durante varias horas. Por supuesto, el buen entretenimiento va bien con la bebida, y además del famoso “mojito”, también se ofrece el cóctel “daiquiri”. El parque John Lennon, que para sorpresa de los turistas también se encuentra en esta ciudad, prueba que los habaneros, además de los bailes tradicionales, también aman a la música rock.
Playas en Varadero
Es interesante que no hay playas en la parte central de la ciudad, sino que están ubicadas en la parte este de La Habana. El lujoso resort de Varadero también está cerca.
Sin embargo, para aquellos que quieran sentir el verdadero ritmo y la vida de La Habana, se recomienda alquilar una habitación o apartamento en propiedad privada, con o sin comidas (que también se puede reservar a través de nuestras agencias de turismo). Debido al clima tropical, las temperaturas aquí, incluso en enero y febrero, raramente bajan a los 10 grados (la temperatura media en estos meses es de 22 grados), por lo que el período invernal también es propicio para visitar y disfrutar. Y la primavera puede ser mágica.
El icono del príncipe Lazar
La Habana es conocida por numerosas comunidades étnicas, que conviven aquí en armonía. Uno de los más numerosos, especialmente desde la época de la revolución socialista, es el ruso. También construyeron aquí su propia iglesia, que fue consagrada en 2008 y dedicada a la Virgen de Kazán. Es poco conocido que, además de otros objetos de valor y santuarios, se guarda aquí nuestro icono del Príncipe Lazar. Además de los rusos, los griegos también tienen su propia iglesia en La Habana, y está dedicada a San Nicolás.
Desde Estambul en 12 horas
Además de los vuelos chárter, que en su mayoría están disponibles en el período estival, también se puede llegar a Cuba mediante líneas aéreas regulares desde varias capitales europeas. Una de las más rápidas y convenientes para nuestros ciudadanos es la aerolínea que vuela de Estambul a La Habana y sigue hasta Caracas, la capital de Venezuela. Este vuelo dura 11-12 horas.
Plaza de la Revolución
Uno de los lugares centrales de La Habana es la Plaza de la Revolución, donde se encuentra un obelisco de 142 metros de altura dedicado a José Martí, poeta y revolucionario de la época de la lucha por la independencia. También hay edificios monumentales de varios ministerios y el Partido Comunista. Entre los edificios más antiguos, deben visitar el Capitolio (antiguo parlamento de Cuba), el Museo de la Revolución (antiguo palacio presidencial), el Palacio del Gobernador barroco del siglo XVIII, el Gran Teatro…
El corazón de la ciudad es la calle peatonal Prado, siempre animada y ruidosa, y no se puede pasar por alto el boulevard y el malecón, que se extiende a lo largo de nueve kilómetros a lo largo del Golfo de México.
Jovan Gajić
Fotos de Irena Todorovic
https://www.politika.rs/sr/clanak/552606/Za-srecu-im-nije-potrebno-mnogo